El director general de Petróleos Mexicanos (PEMEX), Octavio Romero Oropeza, durante la inauguración de la primera etapa constructiva de la Refinería Olmeca y donde además se celebró el cuarto año del triunfo democrático histórico, manifestó al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que para las trabajadoras y trabajadores de la institución representa un gran orgullo ser testigos del rescate de la industria petrolera nacional, que bajo su liderazgo lleva a cabo esta administración.
Añadió que PEMEX no solo es la empresa pública más importante del país, sino que actualmente genera excedentes petroleros que permiten al Gobierno Federal aplicar una política de contención que evita el incremento de los precios de las gasolinas y el diésel, lo que contribuye a que no se dispare la inflación en México, en contraste con lo que ocurre en prácticamente todo el mundo.
Dijo que durante el gobierno del presidente López Obrador, Petróleos Mexicanos ha ido por buen camino, tan es así, que en esta administración se rompió la tendencia de 15 años de declinación en la producción de petróleo, estabilizándola en el primer año e incrementándola de manera que al cierre del mes pasado, se alcanzó una producción promedio de un millón 767 mil barriles.
El director general señaló que las reservas petroleras no solo se han repuesto al 100 por ciento, año con año durante esta gestión, sino que se han incrementado en 400 millones de barriles por arriba de las recibidas. En materia de refinación, el proceso de crudo pasó de 519 mil barriles en noviembre de 2018, a un millón 98 mil barriles en lo que va de 2022, datos que incluyen a la refinería de Deer Park, recién adquirida en su totalidad en busca de la soberanía energética.
Romero Oropeza alabó la adquisición de la refinería ubicada en Texas, ya que no solo se incrementó de manera significativa la producción de gasolinas, diésel y turbosina; sino que adicionalmente, dadas las condiciones actuales del mercado, a tan solo seis meses de haberse cerrado la operación, ya se ha recuperado más de la mitad de la inversión.
En cuanto a la recuperación del mercado interno de combustibles, el director general puso de ejemplo que, en promedio, en junio del año pasado, Petróleos Mexicanos vendió 844 mil barriles diarios de gasolinas, diésel y turbosina; en tanto, en el mismo mes pero de este año se alcanzó un millón 176 mil barriles diarios. De hecho, la tendencia se mantiene significativamente en aumento, ya que en la última semana del mes pasado se vendieron un millón 353 mil barriles diarios.
Lo anterior, acotó Octavio Romero, indica que la institución camina en la dirección correcta, al cumplir con la tarea que encargó el primer mandatario. Además, reiteró el compromiso de atender los pendientes que dejaron las administraciones pasadas, entre los que destaca Lakach, el yacimiento de gas no asociado con una reserva de 900 mil millones de pies cúbicos, situado frente a las costas de Veracruz con un tirante de agua de mil metros y considerado de aguas profundas, relevante tanto por el monto de la inversión realizada de mil 400 millones de dólares, como por sus nulos resultados y el tiempo que estuvo suspendido, por más de seis años.
Es así que, con satisfacción, el director general anunció la reanudación de este proyecto en conjunto con la empresa estadounidense New Fortress Energy, en el cual se habrá de invertir mil 500 millones de dólares adicionales. Con la colaboración de las entidades y órganos reguladores del Gobierno Federal, este proyecto finalmente iniciará producción en julio de 2023 y se rescatará de esta manera la inversión realizada.
Añadió que con la empresa ICA FLUOR DANIEL se firmará un contrato llave en mano para la construcción de la planta coquizadora de la refinería Antonio Dovalí Jaime en Salina Cruz, Oaxaca, por un monto de 3 mil 18 millones de dólares. Dicha obra es de gran relevancia pues así se dejará de producir combustóleo y se incrementará la producción en 70 mil barriles diarios de gasolina y diésel ultra bajo azufre.
La construcción de las coquizadoras en Salina Cruz y Tula; la recién inaugurada Refinería Olmeca con capacidad de refinación de 340 mil barriles; la refinería de Deer Park; así como la rehabilitación de las seis refinerías del Sistema Nacional permitirán alcanzar, al finalizar el mandato del presidente de México, la autosuficiencia de combustibles en el país, además de que tan solo durante la construcción de ambas plantas coquizadoras, habrán de generarse alrededor de 18 mil empleos.