Al activarse la temporada de cosecha del cultivo de trigo, el Subdirector de Gestión Ambiental para el Desarrollo Sustentable, Juan Carlos Gil Núñez exhortó a los productores del Valle del Yaqui a no quemar gavilla, sino reincorporar los residuos al suelo y establecer una agricultura responsable que contribuya a una mayor conservación y protección del medio ambiente, así como evitar daños a la salud.
A fin de contrarrestar el riesgo para la salud de los cajemenses, así como los problemas ambientales, durante el programa Diálogo con Cajeme, el funcionario reiteró el llamado a los agricultores del Valle del Yaqui para evitar la quema de gavilla a cielo abierto durante el presente ciclo, la cual está prohibida en el reglamento ambiental en materia de ecología, de lo contrario, podrían ser acreedores a una multa que se incrementará de 20 a 60 Unidades de Medida de Actualización (UMAS), es decir de mil 924 a 5 mil 773 pesos por hectárea de cultivo.
«Advertimos con anticipación a los productores sobre los daños a los organismos vivientes, y al mismo suelo, que trae consigo la quema de la paja del trigo, por lo que esperamos que se haya generado mayor conciencia y actúen en consecuencia», señaló.
Agregó que, durante la temporada de cosecha del trigo, los verificadores de la Subdirección de Gestión Ambiental, en coordinación con Protección Civil, Bomberos y Seguridad Pública, vigilarán las 24 horas el Valle del Yaqui para detectar si se registra la quema de esquilmos.
Así que, con el fin de evitar el daño ecológico y de salud en el Valle del Yaqui, los productores, dijo, están obligados a buscar nuevas y mejores prácticas, como lo es la labranza de conservación, la cual permite reincorporar la paja de trigo a la tierra de cultivo.
En otro tema de toma de conciencia, el Director General del Oomapasc, Luis Miguel Castro Acosta, llama a la ciudadanía a contribuir con el cuidado del agua y presenta las acciones contempladas en el Programa de Medidas de Mitigación y Preparación contra la Sequía, mismas que se derivan del Programa Nacional Contra la Sequía (PRONACOSE), implementado por la Comisión Nacional del Agua.
Entre dichas acciones, en las que no se contemplan los tandeos, sino la reducción de volumen y presión de agua en ciertos sectores, se incluye la reparación y desarrollo de redes de agua potable, mejoras del equipamiento de bombeo de extracción de agua y distribución de agua, homogenizar la distribución de agua entre los diferentes sectores de la población, planeación de la rehabilitación y mantenimiento de los sistemas de agua potable y alcantarillado, obras de infraestructura hidráulica de distribución.
Además de promover la instalación de micro medición para controlar gasto de agua, promoción de instalación de dispositivos domésticos de ahorro de agua (regaderas y sanitarios), sectorización de la red municipal y control de presión en la red e incentivar el reúso del agua tratada en parques y zonas de riego.
Así como desarrollar campañas de educación pública de sequía con estrategias de corto y largo plazo, en coordinación con los medios de comunicación locales, dividir las líneas de drenaje procedentes de los conjuntos casa habitación en aguas negras y aguas grises, capacitación sobre el uso de las aguas recicladas y la problemática del uso del agua actual.
Identificación de las fugas existentes y la reparación de ellas, distribución tanto en redes urbanas como en los sistemas de riego, implementar bombas y válvulas de control en los diferentes sectores del sistema de distribución, sectorizar los cuadros urbanos con el fin de mejorar la distribución de agua y minimizar la presión de la red.
De igual manera se proyecta generar multas por exceder los límites máximos de agua, disminuir el alto consumo per cápita en uso público urbano y la baja eficiencia, aplicación de métodos que permitan retener agua en los jardines, restitución de especies de vegetación de uso elevado de agua por especies nativas adaptadas a las condiciones de aridez.
También incluye la imposición de restricciones al riego de céspedes y de jardines de tipo paisajístico, limitar el riego de exteriores a horas específicas del día, limitar el número de días de riego a la semana, posicionar el tema agua como un recurso estratégico y de seguridad municipal.
Así como incentivar la educación del correcto consumo del agua y la problemática de la sequía, en los diferentes niveles académicos, en el sector empresarial y en los niveles de gobierno, incrementar los espacios de cultura del agua en el municipio y fortalecerlos donde ya existe con los equipos y materiales necesarios para la correcta promoción en la región y elaborar convenios y programas con empresas e instituciones que contribuyan con la educación, capacitación, cultura del agua y ambiente.