En Santa Ana, conocida como la Llave del Desierto, serán prioridad dos temas: la seguridad y la salud, por lo que seré un instrumento en manos de la ciudadanía para que sean realidad los profundos cambios a los que aspiramos, aseveró Alfonso Durazo Montaño.
“Ya le toca a Sonora, ya le toca a Santa Ana; ya les toca a ustedes, ya les toca a todas y todos los que se ganan el pan honestamente con el sudor de su frente. Este es el momento de que la Cuarta Transformación y el gobierno al servicio del pueblo sean una realidad plena en nuestro estado”, expresó.
El candidato a gobernador por la candidatura común “Juntos haremos historia en Sonora”, (Morena, PT, Verde Ecologista y Nueva Alianza Sonora) comentó que el principal problema de Santa Ana y su región colindante es la seguridad, durante un acto político con militantes y simpatizantes reunidos en la Plaza Zaragoza de la ciudad.
Se comprometió a acabar con el silencio como respuesta y con la impunidad como política en materia de seguridad pública. Por ello, aseguró que sacará a las colonias de Sonora de la violencia y la inseguridad y pondrá final al temor y la incertidumbre. Esta, dijo, es una responsabilidad intransferible, por lo que “no voy a patear el bote para que ahí se las arreglen como puedan más adelante en un futuro que nunca llega… No hay soluciones mágicas o instantáneas, pero soy persistente y no me sé rendir”.
Durazo Montaño reafirmó su interés en proteger a las niñas, jóvenes y adultas, por lo que llegó la hora de declarar la Alerta de Género para ponerle fin a las desapariciones y los feminicidios.
Otro tema esencial para Santa Ana, consideró, es la salud. Por lo que hizo el compromiso de darle a la ciudadanía el cuidado que requiere para enfrentar la pandemia, atender urgencias y enfermedades graves:
“Llegó la hora de una gran transformación de salud para Sonora y para Santa Ana. Haremos a un lado la indolencia y el abandono”, sentenció.
En materia de educación, el candidato a gobernador propuso sustituir los mal llamados créditos educativos con un programa integral de becas a nivel estatal para que ningún estudiante deje la enseñanza por falta de recursos económicos.
Además de la salud, la seguridad y la educación, definió como asuntos prioritarios reactivar la economía mediante apoyos a la producción, a la pequeña y mediana industria, y un impulso histórico al turismo; así como sanar las finanzas públicas que hoy están en terapia intensiva por la corrupción, el derroche y el despilfarro de los gobernantes.